Aprender a tocar un instrumento musical requiere algo más que talento innato. Esto requiere trabajo diario, de la práctico y una rutina realmente estructurada. Si eres un aspirante a pianista, un ávido guitarrista o un cantante en ciernes, no se puede subestimar la importancia de una rutina de ejercicios eficaz. A continuación te mostramos cómo puedes desarrollar una rutina de práctica como músico principiante que te ayudará a dominar el instrumento que elijas.
aprender teoría musical
La teoría musical es la base sobre la que se construye toda habilidad musical. Se trata de una clase esencial para entender cómo funciona la música. Esto implica aprender el notas, desde acuerdosy la estructura de la música.
Hay muchos curso por Internet que proporcionan una introducción profunda a la teoría musical. Arturo Cours es un buen ejemplo, del que muchos usuarios han dejado un reseña positiva. La teoría musical no sólo es aplicable a un instrumento específico, sino que es una base sobre la que todos los músicos pueden construir.
Práctica diaria: trabajo a largo plazo
Como en todo aprendizaje, la clave del éxito reside en rutina de trabajo y práctica constante. Es fundamental marcarse objetivos realistas para tu entrenamiento diario. Por ejemplo, en lugar de fijarse el objetivo de aprender una canción completa en un día, intente aprender una pequeña parte cada día.
El trabajo diario no tiene por qué ser largo, pero sí debe ser regular. Puedes fijarte un objetivo de 20 a 30 minutos de práctica todos los días. Lo importante es hacer de tu práctica musical una parte integral de tu rutina diaria.
Dominar ejercicios técnicos.
Ya sea que esté interesado en el piano, la guitarra eléctrica o el canto, los ejercicios técnicos son cruciales para desarrollar sus habilidades. Estos ejercicios van desde practicar los dedos en el piano o la guitarra, hasta ejercicios de respiración para la voz.
Para los guitarristas, existen ejercicios específicos para desatar los dedos y mejora tu destreza sobre las cuerdas. Los pianistas pueden trabajar en sus partituras de piano para mejorar su lectura de notas.
Los cantantes necesitan aprender a controlar su aparato vocal. EL ejercicios de respiración son un componente esencial de este entrenamiento, al igual que el trabajo de las cuerdas vocales.
Adapta tu rutina a tus puntos débiles
Finalmente, una buena rutina de ejercicios debe adaptarse a su puntos débiles. Esto significa que debes dedicar tiempo a trabajar en los aspectos de tu forma de tocar o cantar que son más débiles.
Si le resulta difícil leer notas, dedique tiempo cada día a este aspecto de su práctica. Si tienes problemas para desatar los dedos de las cuerdas de la guitarra, haz ejercicios específicos para ello. Tu rutina debe ser flexible y evolucionar contigo.
Desarrollar una rutina de práctica eficaz como músico principiante no es una tarea fácil, pero es una inversión que vale la pena. A través de la teoría musical, la práctica diaria, ejercicios técnicos y adaptando tu rutina a tus áreas débiles, podrás mejorar gradualmente tus habilidades y dominar el instrumento de tu elección.
Recuerda que aprender música es un viaje que requiere tiempo, paciencia y práctica. Así que ármate con tu instrumento, ya sea una guitarra, un piano o tu propia voz, y empieza a tocar en tu propio concierto diario. Puede que la habitación esté vacía en estos momentos, pero con trabajo y perseverancia acabará llenándose.